Controlarán la velocidad con cámaras en cinco carreteras importantes
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01-09-2012
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El exceso de velocidad en Costa Rica más que un peligro pareciera un deporte.
Los conductores se acostumbraron a acelerar sus automóviles sin importar lo que indiquen las señales de tránsito.
Tanto así que en el 2011 funcionando las cámaras en carretera durante poco más de un mes las infracciones llegaron a 17 mil.
Este año sin las cámaras solo se han multado 2000 conductores.
Pero tras el aval de la Sala IV el Cosevi afina un plan para que las cámaras no estén solo en algunos puntos.
Ahora controlarán carreteras completas desde su inicio a fin.
El plan convertirá 5 carreteras en rutas controladas.
La primera ruta será la carretera Braulio Carrillo, entre San José y Limón.
En promedio se instalarán unas doce cámaras en los puntos de mayor peligro.
La ubicación específica de cada cámara está por aprobarse en la Junta Directiva del Cosevi.
Las cercanías del túnel Zurquí, la recta de San Miguel, el sector de Guápiles y la Radial Siquirres tendrán su propia cámara multando a los conductores que excedan la velocidad.
Otra ruta que se fortalecerá con nuevas cámaras es la autopista General Cañas.
Allí se instalarán otros puntos de control de velocidad.
Otro de los puntos en el que Racsa instalará nuevas cámaras será en circunvalación.
Se maneja el sector de los Hatillos, San Pedro, Guadalupe y Rhomoser como posibles pasos de control de velocidad.
Se pretende erradicar por completo los piques.
Pero las cámaras no solo se quedarán en el Área Metropolitana.
La ruta de la muerte en Pérez Zeledón entre la iglesia católica y el Hotel del Sur también será monitoreada con estos ojos electrónicos.
En esta zona se pretende disminuir la gran cantidad de atropellos y que a la vez los videos sirvan como prueba en caso de lesiones culposas.
Un estudio de la unidad de investigación y estadística del Cosevi demostró la necesidad de también colocar cámaras en Sarapiquí, la ruta que viaja desde la Virgen al desvío con la ruta 32.
Las 48 cámaras faltantes serán instaladas por Racsa como parte del contrato que se suspendió temporalmente en el 2011.
Las cámaras multarán el exceso de 20 km a la velocidad permitida con montos que van desde los 20 mil hasta los 88 mil colones.
Si los conductores se pasan de 120 kilómetros caen en velocidad temeraria, pagando una multa de 270 mil.
Y si exceden los 150 kilómetros será un delito con pena de cárcel.
Las multas se aplicarán al conductor y no al dueño registral del vehículo.
Los conductores se acostumbraron a acelerar sus automóviles sin importar lo que indiquen las señales de tránsito.
Tanto así que en el 2011 funcionando las cámaras en carretera durante poco más de un mes las infracciones llegaron a 17 mil.
Este año sin las cámaras solo se han multado 2000 conductores.
Pero tras el aval de la Sala IV el Cosevi afina un plan para que las cámaras no estén solo en algunos puntos.
Ahora controlarán carreteras completas desde su inicio a fin.
El plan convertirá 5 carreteras en rutas controladas.
La primera ruta será la carretera Braulio Carrillo, entre San José y Limón.
En promedio se instalarán unas doce cámaras en los puntos de mayor peligro.
La ubicación específica de cada cámara está por aprobarse en la Junta Directiva del Cosevi.
Las cercanías del túnel Zurquí, la recta de San Miguel, el sector de Guápiles y la Radial Siquirres tendrán su propia cámara multando a los conductores que excedan la velocidad.
Otra ruta que se fortalecerá con nuevas cámaras es la autopista General Cañas.
Allí se instalarán otros puntos de control de velocidad.
Otro de los puntos en el que Racsa instalará nuevas cámaras será en circunvalación.
Se maneja el sector de los Hatillos, San Pedro, Guadalupe y Rhomoser como posibles pasos de control de velocidad.
Se pretende erradicar por completo los piques.
Pero las cámaras no solo se quedarán en el Área Metropolitana.
La ruta de la muerte en Pérez Zeledón entre la iglesia católica y el Hotel del Sur también será monitoreada con estos ojos electrónicos.
En esta zona se pretende disminuir la gran cantidad de atropellos y que a la vez los videos sirvan como prueba en caso de lesiones culposas.
Un estudio de la unidad de investigación y estadística del Cosevi demostró la necesidad de también colocar cámaras en Sarapiquí, la ruta que viaja desde la Virgen al desvío con la ruta 32.
Las 48 cámaras faltantes serán instaladas por Racsa como parte del contrato que se suspendió temporalmente en el 2011.
Las cámaras multarán el exceso de 20 km a la velocidad permitida con montos que van desde los 20 mil hasta los 88 mil colones.
Si los conductores se pasan de 120 kilómetros caen en velocidad temeraria, pagando una multa de 270 mil.
Y si exceden los 150 kilómetros será un delito con pena de cárcel.
Las multas se aplicarán al conductor y no al dueño registral del vehículo.